Donde estoy en el mundo? II

Ciro es un fisico en La Sapienza, amigo de un amigo. Un italiano muy bajito y muy hablador que ha viajado el mundo. Parece que es algo mundial: a los fisicos nos gusta caminar por ahi por horas y hablar mierda. Roma es una ciudad grande que se puede cruzar a pie. Fuimos a un bar que tenia comida gratis muy buena, y vino blanco muy refrescante para este horrendo calor.
Cruzamos el rio en direccion a Trasteveres y paramos a comer en un restaurante operado por una familia. Todo era muy informal, y la comida era deliciosa. La muchacha que atendia conocia a Ciro, y uso sus encantos para convencerme que probara el Tiramisu, que era la receta de su abuela. Y que tiramisu!
Subimos por la Via Garibaldi a uno de los puntos mas altos de la ciudad, y luego regresamos al rio para que yo pudiera tirar mas fotos. Ciro me explico como regresar a mi casa tomando una ruta panoramica que me llevaria atraves del Palatino, hacia el Colisseo, y me tomaria 30 o 40 minutos en llegar a mi casa. La otra opcion que me dio era tomar un taxi, que me costaria como 15 euros. Me meti la mano en el bolsillo, conte mi dinero, y decidi que mejor guardaba los 10 euros que tenia para una cerveza.
Ya habia pasado la media noche cuando me puse a caminar por las solitarias calles de Roma vieja con todo mi equipo fotografico que en total valia mas que mi vida. Resulto que El Palatino estaba cerrado, y la ruta que Ciro me dijo no era posible a esta hora de la madrugada. Que clase de mierda, y yo cansado y sin sol para orientarme. Los pies ya me dolian de caminar tanto. Trate de buscar una ruta alterna, pero las pequenyas y enredadas calles de esta parte de Roma aseguraron que me perdiera. Eran calles oscuras y estrechas, y varias veces tuve que salirme del medio para evitar ser atropellado por los pequenyos carros europeos que no me veian. La persona mas sospechoza de toda la ciudad era este puertorriquenyo caminando por callejos oscuros a la 1am, sin direccion alguna, armado con un tripode.
Dos horas despues, luego de hacer un perimetro alrededor de Roma y empapar mi camisa de sudor en el proceso, encontre como llegar al hostal, sudado y exhausto. De seguro levante a todo el mundo en el cuarto del hostal mientras buscaba mi pastilla para dormir y me dormia escuchando mi iPod.