El Límite

Al llegar de mi viaje me llevé una ingrata sorpresa. Mi verja de madera estaba destruida.

Los vecinos de al lado son unos fraternos problemáticos. Una vez llegue a mi casa tarde en la noche, y uno de ellos estaba completamente borracho, en mi patio de alfrente, colocando cuidadosamente botellas vacias de licor a distancias equidistantes una de otras en un bonito patrón. que me motivo a esclamar:

"Hey fucker, why don't you put them in the motherfucking recycle bin?"
"Sorry dude."

Con eso es el tipo de vecinos que tengo que bregar.

Todos los días de juego de Football de la universidad hacen una fiesta fraterna en la propiedad. Eso implica que a las 10am ya me estan levantando los sabados esos pendejitos bebiendo. Según tengo entendido, mientras yo estaba de viaje tuvieron una fiesta y unos borrachos jugando lucha-libre atravesaron mi verja, destruyendola una porcion de más de 10 pies de ancho y abriendo mi patio hacia su propiedad. Not cool.

Para colmo, el cobarde pendejo ese no tuvo los cojones de venir a disculparse ni nada. Tuvo que ir mi roommate a donde ellos y decirle, con su infinita paciencia, que tenían que arreglar eso. Le dijeron escusas flojas de que lo arreglarian en esos días, y luego el pendejo tuvo el descaro de tirarle una labia floja a ella.

Dias después el vecino pasó y me encontro en mi balcón sentado tomandome un traguito. Me saludó con la cabeza y aceleró el paso.

"When are you going to fix my fence?" dije y tome de mi trago.
"It's cool."
"When are you going to fix my fence?" repetí, poniendo el trago abajo.
"Don't worry."
"When are you going to fix it?"
"Soon."
"When?"
"This weekend."
"Awesome." dije con sarcasmo mientras levantaba mi trago en señal de brindis.

Y como era de esperarse ni aguaje hicieron en el fin de semana de arreglar algo. Me había dicho a mi mismo que si ellos tiraban una fiesta con nuestra verja rota, yo iría a su casa armado de mi sartén de hierro fundido que pesa un montón y le rompería el craneo al vecino y luego le metería mis dedos en el cerebro hasta que sus piernas empezaran a convulsar bajo mi control. Afortunadamente no tiraron ningún tipo de fiesta.

Hace unos minutos toqué a su puerta con una libreta y un boligrafo en la mano.

"I need you to write your name, phone, and your landlord's information."
"Oh. Ok."

Escribió la información que le pedí mientras sus amigos me miraban con ojos asustados.

"We were going to fix it today, but we didn't."
"If you fix it before my landlord contacts you, that would save us a lot of trouble."

Mi roommate, que es muy nice y diplomática, esta molesta por el asunto, pero a la vez no quiere que los vecinos se molesten con nosotros por temor a empezar una guerra de odio. Yo lo que le expliqué a ella es que hay que poner un límite en algún momento, y para mi el límite de propiedad es un límite razonable.